Durante 75 años, las futuras madres
finlandesas han recibido una caja del Estado. Algo así como un kit
para principiantes con ropa, sábanas y juguetes que puede ser usada
incluso como cama. Incluso hay quien opina que esto ha hecho que
Finlandia tenga uno de los índices de mortalidad más bajos del
mundo.
Es una tradición que se remonta a los
años 30 y que fue pensada para darle a todos los niños de
Finlandia, independientemente de su condición, un inicio en la vida
igualitario.
El pack de maternidad – un regalo del
gobierno- está disponible para todas las futuras madres.
Contiene ropita, un saco de dormir,
ropa de calle, productos de baño para bebé, pañales, ropa de cama
y un colchoncito.
Con el colchón en el fondo, la caja
sirve como primera cama ara el bebé. Muchos niños,
independientemente de su origen social, echan sus primeras siestas en
la seguridad de las cuatro paredes de cartón de esta caja.
Las madres pueden elegir entre la caja
o una ayuda en metálico, actualmente cifrada en 140€, pero el 95%
de ellas elige la caja ya que es más rentable.
La tradición data de 1938. Al inicio,
esta ayuda solo era para las familias con menos ingresos, pero esto
cambió en 1949.
Aunque la caja no se regala
automáticamente, para tener derecho a ella hay que pasar una
revisión médica antes del cuarto mes de embarazo.
En los años 30, Finlandia era un país
pobre y la tasa de mortalidad infantil era alta (65 de cada 1000
niños moría). Pero las estadísticas mejoraron rápidamente en las
décadas siguientes.
Mika Gisser, profesor en el Instituto
Nacional de Salud y Bienestar de Helsinki, explica varios motivos a
los que se debe este cambio. La caja de maternidad y los controles
prenatales para todas las mujeres aplicados en los años 40 fueron
seguidos, en los años 60, por un sistema de Seguridad Social y un
sistema central de asistencia sanitaria.
El contenido de la caja ha ido
adaptándose al cambio de los tiempos.
Durante los años 30 y 40 solo contenía
tejidos, ya que las madres estaban acostumbradas a coser la ropa de
sus bebés.
Pero durante la Segunda Guerra Mundial,
la franela y el paño de algodón eran destinados al Ministerio de
Defensa, por lo que algunos de los productos fueron sustituidos por
sábanas de papel y envueltas de tela.
En los 50 se aumentó la disponibilidad
de vestidos fabricados industrialmente, y en los 60 y 70 se empezaron
a fabricar de telas más elásticas.
En 1968 llegaron los saquitos de
dormir, y al año siguiente aparecieron los pañales industriales.
Aunque no durante mucho tiempo ya que
con el cambio de siglo se están volviendo a usar los pañales de
tela por motivos ambientales.
Incitar a ser buenos padres es también
parte de la política de la caja de maternidad.
“Los bebés sulen dormir en la misma
cama que sus padres y es recomendable que no lo hagan” dice Panu
Pulma, profesor de Historia Finlandesa y Nórdica en la Universidad
de Helsinki. “Al incluir la caja a modo de cama hacemos que la
gente empiece a hacer dormir a sus hijos separados de ellos”.
Por otro lado, los biberones y chupetes
han sido eliminados de la caja para inducir al amamantamiento
natural.
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| El contenido de la caja. |
“Uno de los principales objetivos de
este sistema es que las madres amamanten más” dice Pulma. Y añade
“y está ocurriendo”.
También opina que incluir un libro de
fotografías tendría un efecto positivo, alentando a los niños a
relacionarse con los libros y , algún día, a leer.
Además de todo esto, Pulma opina que
la caja es un símbolo. Un símbolo de la idea de Igualdad y de lo
importantes que son los niños.
Con información de; BBC News
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