El Tribunal Superior a ordenado que se realicen una serie de investigaciones sobre la muerte de civiles inocentes asesinados por el Ejército Británico durante la invasión a Iraq.Es una sentencia pionera que puede tener un gran impacto sobre como el Ejército Británico llevará a cabo sus intervenciones entre población civil en el futuro. El Tribunal ordenó que se siguieran pesquisas forenses sobre 161 muertes.
En practica, se llevarán a cabo una serie de audiencias -probablemente más de 100 - como resultado de la sentencia dictada tras 3 años de batalla legal en nombre de las familias iraquíes.
El Tribunal ha rechazado la realización de una única audiencia pública en la que se investiguen las detenciones militares y los métodos de interrogatorio británicos durante los seis años de ocupación del sureste iraquí, aduciendo a que el proceso duraría mucho y costaría demasiado.
La primera audiencia indagará sobre la muerte de 11 civiles que murieron bajo custodia de los militares británicos. Será seguido por otras investigaciones de incidentes en los que murieron civiles - a menudo bajo circunstancias poco claras y discutibles- pero en los que se cree que hubo uso ilegítimo de la fuerza.
En Diciembre del años pasado, el Ministerio de Defensa pagó 14 millones de libras como indemnización a 205 iraquíes que denunciaron maltrato y encarcelamientos ilegales. Actualmente se están negociando otros 196 pagos. Se espera que presenten otros cientos de denuncias.
Con información de: The Guardian
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