Jornada caótica donde las haya. Ubrique parecía hoy una ciudad sitiada en la que las autoridades estaban desbordadas y el descontrol era total.
A pesar de la gran cantidad de agua que ha caído, los grandes daños e inconvenientes para los vecinos podrían haberse disminuido, cuando no eliminado, si el gobierno presidido por Javier Cabezas no hubiera paralizado el PLAN DE DEFENSA CONTRA INUNDACIONES y otro proyecto de desvío de aguas propuesto por el PSOE para circunstancias como las de hoy.
Desprovistos de la más mínima previsión al respecto por parte de los señores que transitan (que no otra cosa) por el Ayuntamiento, los vecinos tienen que defenderse por sus propios medios de las grandes riadas que habitualmente se producen en la localidad.
Señor Alcalde ha oído esa gran verdad de nuestro refranero que dice “más vale prevenir que curar”?
Gran cantidad de aguas bajan con cada tormenta de la zona de “El Olivar” convirtiendo La Ladera, Avda. Diputación y Plaza de la Estrella en un torrente, debido en parte a que el agua de escorrentía baja concentrada a causa del muro de retención que en su día se dispuso tras Mirasierra y La Ladera. La recién remodelada Calle Real ha sido presentada oficialmente como alternativa turística para piragüistas. Los Callejones se convierten en un “arrozal vietnamita” ¿Cabezas te encontrara un día el Vietcong y te dará un remojón?
Nuestro “Gran Jefe Indio” hizo acto de presencia en las zonas anegadas acompañado de nuestra siempre bien-amada Inma.
¿Para cuando soluciones? ¿Cuándo veamos barquitas en el Mojón?
Agradecimientos a los numerosos de trabajadores municipales (bomberos, policías, GC, barrenderos, etc) que han hecho todo lo posible para paliar los daños provocados, en parte, por la ineptitud de los que nos (intentan) gobernar.
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